La declaración de la Red Mundial de la Salud (WHN) que califica el brote actual de viruela del mono como una pandemia se produce cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) organiza una reunión para decidir sobre su propia designación del brote de esta enfermedad contagiosa con casos que están aumentando en países donde esta enfermedad no es frecuente.
© Cortesía de CDCLos síntomas de la viruela del mono se muestran en la mano de un paciente el 27 de mayo de 2003.
La declaración de WHN insta a las autoridades sanitarias nacionales y mundiales a tomar medidas inmediatas y eficaces para evitar que la viruela del simio se convierta en un desastre.
La Red Mundial de la Salud es una colaboración de equipos científicos y ciudadanos que empoderan la acción para promover la salud y prevenir daños. Es independiente de cualquier organismo político o gobierno, y está guiada por la compasión y el rigor científico.
Incluso con tasas de mortalidad mucho más bajas que las de la viruela, a menos que se tomen medidas para detener la propagación de esta enfermedad viral, medidas que se pueden implementar en la práctica rápidamente, millones de personas pueden enfermar.
Esto ocurre cuando hay 3,417 casos confirmados de viruela del mono en 58 países y el brote se está expandiendo rápidamente en varios continentes.
Gran Bretaña, donde se registraron casi 800 casos del virus el mes pasado, tiene la mayor cantidad de infecciones reportadas fuera de África, y las tendencias de casos en ese país preocupan a los expertos en toda Europa, porque se ha convertido en el epicentro del brote y están sopesando el mejor enfoque para tratar el brote de viruela del mono, en medio de la pandemia de coronavirus que ya dura varios años.
El propósito esencial de declarar una pandemia es lograr un esfuerzo concertado en varios países o en todo el mundo para evitar un daño generalizado, sostiene la declaración de WHN.
“No hay justificación para esperar a que la pandemia de viruela del mono siga creciendo. El mejor momento para actuar es ahora. Al tomar medidas inmediatas, podemos controlar el brote con el menor esfuerzo y evitar que las consecuencias empeoren. Las acciones necesarias ahora solo requieren una comunicación pública clara sobre los síntomas, pruebas ampliamente disponibles y rastreo de contactos con muy pocas cuarentenas. Cualquier retraso solo hace que el esfuerzo sea más difícil y las consecuencias más graves”, dijo Yaneer Bar-Yam, PhD, presidente del Instituto de Sistemas Complejos de Nueva Inglaterra y cofundador de WHN.
La viruela del mono es un virus con el potencial de causar un daño significativo a las personas, incluida una enfermedad dolorosa aguda que puede requerir hospitalización y puede provocar la muerte, cicatrices en la piel, ceguera y otras discapacidades a largo plazo.
Los más vulnerables a enfermedades graves son los niños, las personas embarazadas y las personas inmunodeprimidas.
Fuente: MSN Latino (La Opinión)
