PUERTO BOLÍVAR.- En avanzado estado de descomposición, así fue encontrado el cuerpo de Bolívar Alexander Guerrero, de 24 años de edad, quien supuestamente había sido secuestrado el pasado miércoles 12 de octubre en el barrio Blanca García, más conocido como ‘La Barraca’, en Puerto Bolívar.
El joven se encontraba en una esquina, cuando llegó un vehículo sin placas donde se bajaron sujetos encapuchados, gritando ser policías, lo obligaron a subir al carro y luego dispararon al aire con la intención que nadie se meta.
Ocho días después, exactamente a las 10:00 de este miércoles 19 de octubre, fue halado flotando frente a la punta del faro del Archipiélago de Jambelí.
Su cuerpo tenía amarrado dos baldes de color negro en cuyo interior tenía concreto, sus verdugos lo fondearon en alta mar.
HALLAZGO
El mayor Paulo Viteri, jefe de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) de El Oro, explicó que por un comunicado del ECU 911, fueron alertados sobre el avistamiento de un cuerpo en alta mar.
Al parecer, pescadores que estaban realizando faenas de pesca en el sector, dieron aviso al Comando de Guardacostas de la Capitanía de Puerto Bolívar, para que procedan al rescate del cadáver.
Según los marinos, acudieron hasta el sector de la Punta de Jambelí, donde verificaron que la novedad era real, un cuerpo estaba flotando en el mar, tenía amarrados dos baldes que tenía concreto.
“Tienes signos de haber sido fondeado y de antropofagia. Tendríamos que esperar el protocolo de autopsia para poder determinar la causa de la muerte. La Fiscalía y la Unidad Antisecuestro estaban investigando un delito de secuestro”, dijo el jefe de la Dinased.
Y es que, al momento de su hallazgo, el hombre tenía amarrado a su cintura y pies, dos baldes de color negro, dichos baldes estaban con concreto, además, tenía una red de pescar.
SECUESTRO
Hasta el Comando de Guardacostas Sur, llegó su madre, Sandra, quien buscaba desesperadamente y no perdía la fe de encontrarlo sano y salvo a Bolívar Alexander Guerrero.
Ella llegó alrededor de las 11:00 hasta el muelle, mientras esperaba noticias y el arribo de un cadáver que podría ser su hijo, estaba impaciente.
A lo lejos vio que dos lanchas de la Marina se acercaban a la orilla lentamente, ella se levantó de una silla de plástico que el personal uniformado le dio para que espere mientras llegaba el cadáver.
Cuando llegó el cuerpo, ella se acercó y al ver el estado en el que se encontraba el cadáver, se lamentó, rompió en llanto al ver la misma ropa que tenía su hijo. Un calentador color azul con franjas blancas y una camiseta blanca con números rojos, confirmaron que se trataba de Bolívar.
Testigos indicaron que la noche del miércoles 12 de octubre, el joven se encontraba en el barrio Blanca García, más conocido como La Barraca, en Puerto Bolívar.
De pronto, llegaron sujetos encapuchados en un carro y ellos gritaron que eran agentes de la Policía Judicial para luego subirlo al vehículo y llevárselo.
Desde ese momento no volvieron a saber de él y buscaban por todos lados sin tener repuestas positivas.
Incluso fueron a la Policía Judicial donde les indicaron que no se ha realizado la detención de él, además, llegaron a buscarlo a hospitales, pero nada.
Su madre pasó una semana desesperada, pues asegura el joven no le hacía daño a nadie y que se dedicaba a la pesca, además, que es padre de una niña de dos años.
“Queremos que se haga justicia. Todo se lo dejamos en manos de Dios, esto que le hicieron a Bolívar no tiene nombre”, dijo uno de los familiares.
Y es que, el cuerpo estaba irreconocible, parte de su cabeza se había desprendido del cuerpo, por lo que solo se lo reconoció por su vestimenta. (DIARIO CORREO)
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