Para guacharnaco no se estudia

La desfachatez y la sinvergüencería tienen su lado bueno: la sinceridad.  Lo que ocurrió en la entrevista que hoy concedió Luis Almeida a Teleamazonas es un ejemplo de aquello.  El asambleísta no tuvo empacho en anunciar al periodista Milton Pérez que la Asamblea se limpiará con el fallo de la Corte Constitucional que ordenó que el juicio a Guillermo Lasso se limite al caso de posible peculado en Flopec y que lo hará por los motivos que se a ellos se les antoje. Es decir, lo que se aparezca en el camino.

Es un juicio político y se puede introducir cualquier tema donde se pruebe que Lasso incumplió con el pueblo, aseguró Almeida muy suelto de huesos en su limitadísima capacidad de expresión. Es más, anticipó que él llevará al juicio un caso según el cual Lasso se benefició del pago del Estado ecuatoriano de los bonos Brady. En otras palabras, cualquier cosa.

De acuerdo a Almeida, el fallo de la Corte Constitucional sirve únicamente para admitir el juicio pero no para establecer los temas por los que puede ser juzgado, como dice el fallo. Cuando Pérez, visiblemente asombrado por las cosas que le decía Almedida, le preguntó por las razones del juicio, el asambleísta lanzó una afirmación insólita: “porque es indolente, porque su egoísmo no le permitió ser padre de la Patria: es la gran verdad”.  Cuando el periodista le pidió que precise en qué le falló Lasso a la Patria, Almeida ensayó una pose de hombre ilustrado y contestó con otra pregunta: “¿Bajó o no bajó los impuestos?”. Es decir que en la lógica de Almeida, la destitución de Lasso puede ser incluso por no haber cumplido con una supuesta promesa suya de no aumentar impuestos.

Lo relevante de la declaración de Almeida, es que su razonamiento no se limita a su estructura cultural exótica y pintoresca, sino que pone sobre la mesa un plan más grande:  en la Asamblea, correístas y socialcristianos trabajan intensamente para encontrar un atajo que les permita burlar el fallo de la Corte Constitucional. Los que van tras la cabeza del Presidente saben que la causal del posible peculado en Flopec es débil y no tiene el peso que quisieran para hacer del proceso un asunto más sexi. “La Corte se extralimitó y dijo que solo se puede enjuiciar por peculado. ¿Pero cuántos peculados hay?”, añadió el asambleísta haciendo más explícito aún el plan que existe para acribillar al Presidente con cuanto tema se les venga a la mente a los sectores interesados en cortar su cabeza. En otras palabras, Almeida en su chabacanería desnudó el plan que se está preparando para el juicio: saltarse el fallo de la Corte Constitucional que dice, expresamente que se dispone a la Asamblea “que en el proceso de juicio político se excluya la consideración de los hechos, inferencias y pruebas que se relacionen con los cargos primero y segundo, así como lo contenido en la sección octava de la solicitud titulada ‘Otros Indicios que vulneran el Principio de Confianza¨.

Ser chabacano y sinvergüenza tiene una ventaja: la sinceridad. Por: MARTIN PALLARES

Foto Asamblea Nacional