“Llegaron como una organización de ayuda social, nos captaron mediante gente conocida del medio, primero ingresamos como socios con una aportación de 20 dólares mensuales, luego nos dijeron que nos van a ayudar con medicinas, que nos van a ayudar socialmente y luego dijeron que había el proyecto de las casas y que nos van a ayudar con financiamiento, con el proyecto de la vivienda teníamos que hacer un aporte de 100 dólares para ingresar y muchos con el entusiasmo de tener nuestra casa propia aportamos”, dijo Carina, una de las perjudicadas que tomó la iniciativa de denunciar el caso de una presunta estafa masiva.
Aportaban USD 150 mensuales para la estafa
La organización que ofrecía la ayuda sería de Ibarra, quienes mostraron e hicieron público un contrato, y les habían hecho firmar, pero los responsables del grupo de ayuda no firmamos, también les habían hecho firmar una letra de cambio por 3.000 dólares, y les pidieron las escrituras de los terrenos donde supuestamente iban a construir.
Los supuestos beneficiarios iniciaron con los aportes de 150 dólares mensuales, todo esto inició el mes de octubre del 2023, “nos ofrecieron que las casas estarían en un mes para los primeros que ingresamos, al llegar al mes de enero no se ha concretado nada, lo que hicieron es una supuesta inspección, dijeron que van a venir una segunda vez, con esto la gente dejó de aportar, adicionalmente que se había viralizado videos en los que denunciaban que era una estafa”, argumentó la denunciante.
Oferta resultaría en estafa
Los constructores reaccionaron y planificaron una reunión, el objetivo había sido pedirles que no se preocupen, que sí les van a ayudar, “y nos vendieron la idea que nos van a dar una casa en 3.000 dólares con acabados con baldosa, y mucha gente había seguido pagando, pero hasta la presente fecha no se ha construido nada”, dijo Carina.
Dentro de la demostración del proyecto, se había construido una casa modelo en el sector de San Isidro de Patulú, pero la casa modelo no estaría terminada, “ellos indican que han entregado material de construcción, pero no han entregado nada, hay gente perjudicada que no sabe ni leer, hay gente de la tercera edad, madres de familia, familias que se están separando porque el esposo no quiso hacer la aportación y lo hizo la esposa y están perdiendo dinero, la letra de cambio es otro tema que nos podría perjudicar”.
A toda esta situación se suma que, dentro del contrato que les habían hecho firmar, estaría una cláusula en la que señalaría que en el caso de que exista una demanda deben hacerlo en Ibarra. “En este contrato nos hicieron renunciar al fuero, es decir que, si nosotros queríamos seguir alguna acción jurídica, tenemos que ir a Ibarra y no en Riobamba donde se firmaron los contratos. No pueden hacer una acción legal penal, si denunciamos como estafa masiva tenemos un contrato que es un acto civil y para ello necesitamos la firma del grupo, y fueron tan inteligentes que jamás firmaron el contrato”. (DIARIO LA PRENSA)
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