“Yo no crié un hijo asesino ni un criminal”, entre lágrimas manifestó Mariana Solórzano, abuela de Xavier C., quien es sospechoso en la muerte de Lilibeth Vera.
Los familiares y amigos, con pancartas y gritos de justicia, piden la liberación del joven y que el caso sea investigado para que la muerte de Vera no quede en la impunidad.
Solórzano entre lágrimas manifestó que al momento en que su nieto estaba con la señorita, lo llamó para que la vaya a ver porque fue invitada a una merienda.
En ese momento es que aseguran que Xavier C. dejó sola a Vera para ir a recoger a la abuela; sin embargo, después una amiga se ofreció a llevarla y le envió un mensaje al sospechoso para que ya no la recogiera, pero como él manejaba no lo leyó y llegó a la casa donde se hacía la merienda.
“Yo lo vi, las personas que estaban ahí lo vieron, no estaba con sangre ni nada, yo le dije que ya me iban a deja en una media hora y entonces mi hijo regresó a donde la dejó a la joven”, expresó.
Génesis del Rosario, quien es la tía, manifestó que su familiar al escuchar que la fallecida gritaba fue pedir ayudar, pero que las personas a las que encontró no le colaboraron y entonces fue a ver a los familiares.
Además, aseguró que él también ayudó a buscar a Lilibeth y que después de rendir su versión nunca escapó, porque no era culpable. Explicó que la detención se dio en el trabajo del chico.
Mientras que el padre Bresner Cárdenas, dijo este caso debe de ser investigado porque Xavier es inocente y que deben de encontrar al verdadero culpable porque el crimen no debe quedar en la impunidad. (DIARIO CORREO)
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