La irlandesa Sylvia Halcrow, de 53 años de edad, tuvo que vivir una aterradora historia luego de que la parte metálica de un brasier le causara una peligrosa patología que la dejó en estado de coma y casi la lleva a perder la vida.
La herida en su piel, causada por el aro sujetador de su brasier, fue el que le produjo una fascitis necrosante, una infección grave que le afectó los tejidos blandos de su busto, la cual no pudo ser controlada con medicamentos.
Halcrow, estaba siendo presa de la desesperación, por lo cual ya no aguanto más y acudió a un servicio de emergencias médicas para ser revisada a profundidad.
Allí le encontraron un absceso en su seno derecho, por lo cual fue remitida al hospital Aberdeen Royal Infirmary para que recibiera atención especializada.
La infección avanzó rápidamente y sus órganos comenzaron a colapsar, por lo cual debió ser sometida a una intervención quirúrgica en la cual determinaron que debían extirparle parte de los senos y ponerla en un coma inducido.
La mujer comentó que, mientras estaba inconsciente, necesitó de dos cirugías adicionales para que le pudieran eliminar una bacteria carnívora que se había alojado en su organismo.
Tras una semana de permanecer en un coma inducido y de presentar una serie de mutilaciones físicas, la mujer logró despertar aunque debió permanecer internada casi un mes en el hospital, adicionalmente a los cuatro meses de reposo ordenado por los médicos que la atendieron.
Un año después del lamentable hecho, aún no puede creer que toda esta travesía de salud fue causada por el alambre de su brasier. (LUIS FERNANDO JULIO – RCN RADIO)
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