Pena máxima agravada para responsable de la violación perpetrada contra su sobrina

Francisco de Orellana (Orellana), 16 de mayo de 2025.- Una mujer –ahora de 23 años– desde sus 17 años fue víctima de violación incestuosa cometida de forma sistemática. El agresor es su tío paterno, Frank Guido T. J., del cual tiene dos hijos, concebidos en esa situación de violencia extrema.

El 6 de agosto de 2016 –tras la muerte de su madre–, el padre de la víctima (entonces de 14 años) la dejó a ella y a sus tres hermanos al cuidado de su madre en Orellana: no volvió a visitarlos ni a enviar dinero para su manutención.

Durante tres años, ella y sus hermanos recibieron violencia verbal y maltrato físico.

Cuando la adolescente cumplió 17, su tío –conocido con Chamán– empezó a violentarla de otra forma: le dijo que las cartas le revelaron que podía ser vendida (prostituida) para que devolviera el dinero que él y su abuela gastaban en mantenerla a ella y a sus hermanitos. La víctima se negó a esta pretensión.

En otra ocasión, el hombre la citó atrás de la casa para darle un remedio para los dolores de cabeza que solía tener la adolescente. Una vez en el lugar, le hizo percibir una colonia que la dejó inconsciente. Cuando despertó, el tío estaba consumando el delito en ella: “cuidado con avisar a nadie, porque te mato a vos y tus hermanos”, fue la amenaza.

Los eventos de violación se repitieron una y otra vez. Producto de las agresiones, resultó embarazada. Cuando nació el bebé, Frank Guido T. J. también amenazó con matarlo para que su sobrina no dijera que él era el padre.

Ella huyó de la casa, hacia la casa de una amiga. Luego de unos meses la encontraron y su abuela le pidió que regresara, que “ya sabía quién era el padre” y que iba a ayudarla. Sin embargo, el tío la sometió nuevamente al ciclo de violencia sexual, amenazándola (a ella y a su bebé).

Con un segundo embarazo en curso, la golpeó, asfixió y violó, frente al primer hijo. Luego la dejó abandonada en una habitación, inconsciente y con su hijo junto a ella. Cuando despertó, llamó a su hermano menor, quién acudió al lugar. Por gestión de su mejor amiga y con ayuda de su hermano, la joven fue ingresada a una casa de acogida en 2022, donde nació su segunda hija.

La directora de dicha casa denunció a Frank Guido T. J. en la Fiscalía, luego de escuchar su historia. En la audiencia de juzgamiento, el ahora sentenciado se acogió al derecho al silencio.

Tras haber escuchado la reproducción del testimonio anticipado de la víctima y de sus dos hermanos, de las peritas se entorno social y de la psicóloga, y de otros testigos, el Tribunal de Garantías Penales sentenció a Frank Guido T. J., actualmente de 37 años, como autor de violación y le impuso una pena máxima agravada de veintinueve años de privación de libertad y al pago de una reparación integral de 10.000 dólares y de una multa de 600 salarios básicos unificados.

Mientras tanto, la joven madre debe continuar con terapias psicológicas en la Red de Salud Pública.

Información jurídica

Este caso se investigó y sentenció por violación, delito tipificado en el artículo 171, inciso primero, numeral 2, del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que se sanciona con diecinueve a veintidós años de privación de la libertad. La pena se elevó un tercio por la aplicación de las circunstancias agravantes 4, 5 y 6 del artículo 48:

• 4. Si la víctima está o resulta embarazada, se halla en la etapa de puerperio o si aborta como consecuencia de la comisión de la infracción.
• 5. Compartir o ser parte del núcleo familiar de la víctima.
• 6. Aprovecharse de que la víctima atraviesa por una situación de vulnerabilidad, de extrema necesidad económica o de abandono.

FGE