Está por comenzar la temporada de lluvias con ella el avistamiento de la mariposa negra, un animal rechazado por su aspecto y su fama de mensajera de la muerte.
La presencia de estos animales suele causarnos sorpresa y temor, pues aparecen inesperadamente posadas sobre las paredes, en los marcos de las ventanas, ocultas en rincones o volando alrededor de los focos con su extraño aleteo y chocando contra los cristales.
Algunos consideran su aspecto como repulsivo, pero la mayoría les teme por las supersticiones y creencias que la rodean.
Y es que durante siglos, la mariposa negra ha sido señalada como mensajera que anuncia la muerte de un familiar cercano.
La mariposa negra, también llamada “ratón viejo”, en realidad es una polilla; una de las más conocidas es la ascalapha odorata, que toma su nombre del demonio griego Ascálafo, sirviente de Hades. Habita en todo el continente americano, desde el sur de Estados Unidos hasta Argentina. Las hembras, más grandes que los machos, llegan a alcanzar los 19 centímetros.
Mariposa de la muerte o bruja negra
Debido a su aspecto, su gran tamaño y sus hábitos nocturnos, suelen confundirse con los murciélagos. Desde la época prehispánica se piensa que es un mensajero del mal; para los mexicas tenía varios nombres: micpapalotl: “mariposa de la muerte“; mictlanpapalotl: “mariposa del lugar de los muertos”; miquipapalotl: “mariposa de la mala suerte” o tetzahupapalotl: “mariposa del espanto”.
Su mala reputación ha trascendido el tiempo y las fronteras: en Estados Unidos le dicen black witch o bruja negra; mientras que en algunos países de Sudamérica también le llaman mariposa bruja, o simplemente bruja, y se le considera una mensajera de malas noticias.
En algunos pueblos le atribuyen poderes malignos: que son venenosas, que inoculan sus larvas a los humanos mediante picaduras o que el polvillo que sueltan es nocivo y provoca urticaria o ceguera.
Pero la mariposa nocturna solo tiene mala fama: se trata de un animal inofensivo y con un papel importante en el ecosistema, pues sirve de comida a aves, murciélagos y reptiles. Y también poliniza las plantas, al alimentarse de néctar, sabia de los árboles o fluidos de frutos maduros.
Además, si se le mira de cerca, no es tan desagradable, pues sus alas escamosas no son del todo oscuras, ya que algunas presentan patrones tornasolados.
Mariposa negra: importante para la polinización
Al iniciar la temporada de lluvias, podemos verla a la mariposa negra refugiándose en patios traseros, cobertizos o paredes. Según el portal mariposass.com, estas mariposas nocturnas vuelan hacia el norte durante esta época en México, entre los meses de junio y octubre.
A pesar de toda la mala fama que le atribuyen, son las mariposas nocturnas las que deben temer a los humanos, y no al revés. Primero, porque la gente llega a matarlas cuando las encuentra, pensando que con ello eliminan la “mala suerte”.
Por si fuera poco, la luz artificial de las ciudades las desorienta, pues la confunden con la Luna: y es que se piensa que utilizan la luz de nuestro satélite para guiarse en las noches.
¿Qué debes hacer si ves una mariposa negra en tu casa? Simplemente dejarla en paz y esperar a que retome su camino. No asustarla y mucho menos matarla: se trata de una especie que forma parte del ecosistema y que desempeñan un papel importante en la polinización.
Fuente: Azteca Noticias
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