El cobro de utilidades a la banca incidirá en la disminución de entrega de créditos, asegura entidad

Con la vigencia de la Reforma Tributaria, la banca deberá pagar un impuesto por las utilidades obtenidas el año anterior. Esto tendrá un efecto en la entrega de créditos, según Asobanca, de cerca de USD 4 000 millones.

Ese monto no es poca cosa si se toma en cuenta que en el 2023, en números redondos, la banca registró créditos otorgados por USD 40 000 millones. De esos, USD 9 112 millones fueron créditos nuevos que se entregaron a 873 469 personas. ¿Cuánto de esto fue para créditos productivos, pequeñas y medianas empresas, vivienda y microcrédito? El 58% y el restante 42% estuvo destinado al consumo.

Pero no es el impuesto a las utilidades la única variable que afectará al crédito formal en el Ecuador. Las autorretenciones del impuesto a la renta aprobadas en diciembre del año pasado significan que la banca pasará de pagar un 1,73 % al 5 %.

A eso se suma la reincorporación del ISD para los pagos que realizan los bancos por los créditos que obtienen en el exterior. Ello limitará la llegada de aproximadamente USD 2 000 millones. Además, los USD 184 millones que pagará la banca por impuesto a las utilidades tienen como consecuencia que los bancos paguen al Estado, adicionalmente a los montos que venían cancelando, USD 600 millones.

La entrega de créditos en Ecuador ya había perdido ritmo. En el último año, desaceleró su crecimiento en un 5,3%.

En 2023 esa desaceleración fue una respuesta al contexto país: una inseguridad con incidencia directa en las actividades productivas y de consumo, la temporada invernal y la iliquidez de la economía.

El Banco Central advirtió que las últimas decisiones del Gobierno afectarían la liquidez del sistema financiero y por ende al crédito. Dijo también que ello traería como consecuencia una disminución del crecimiento económico del país de hasta 1 punto porcentual del Producto Interno Bruto. (ECUAVISA)