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Una lujosa casa relaciona a una empresa denunciada por tráfico de diesel, con Dalo Bucaram

Una de las empresas del alcalde de Guayaquil, Corpalubri, denunciada penalmente por la Agencia de Control de Hidrocarburos por presunto millonario tráfico de diesel subsidiado, compró un lote de terreno a la compañía de Dalo Bucaram, dos años después Corpalubri construyó una lujosa casa que fue transferida, por 1’300.000 a una empresa de Miami. En la casa, ubicada en uno de los sitios más exclusivos de Samborondon, viven Dalo Bucaram y su familia.

Los intentos de los bloques de la oposición —RC5, PSC y Construye— por evitar que la Comisión de Seguridad de la Asamblea se plasme en un análisis e investigación del tráfico de combustibles, en el que está denunciado el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, se expresaron crudamente cuando los miembros de esta Comisión, excepto los aliados del oficialismo, no asistieron a las comparescencias del ministro de Energía, de la ministra del Interior y del comandante general de la policía. El correísmo, sobre todo, trata de evitar que se plasmen las intenciones de vincular este hecho con beneficios para el crimen organizado. 

En julio de este año, la directora distrital del Guayas, Nicole Bermúdez Pena denunció penalmente a dos empresas comercializadoras y distribuidoras de combustible y a otras nueve personas, entre ellas al alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez Henríquez, sus hermanos y otros personajes presuntamente vinculados con el delito. El Gobierno denunció que la Agencia de Control y Regulación de Hidrocarburos detectó posibles diferencias entre el volumen de combustible despachado por Petroecuador y el volumen facturado por varias estaciones de servicio. 

Una de las empresas mencionadas en la primera de dos denuncias fue Corpedesa, cuyos accionistas eran el alcalde de Guayaquil y varios de sus familiares. Pero en una segunda denuncia, presentada el 15 de agosto del 2024, se detalla un entramado de empresas y personas naturales que, según la funcionaria denunciante de la Agencia de Control de Hidorcarburo, habría generado graves perjuicios económicos al Estado ecuatoriano. Esta segunda denuncia detalló que una red de negocios de combustible vinculada al alcalde de Guayaquil y sus socios, estaba integrada por tres segmentos: automotriz, industrial y naviero. En ese contexto fueron denunciadas nueve empresas, entre estas varias comercializadoras de combustibles y de lubricantes, un terminal naviero… y cinco personas naturales, entre ellas, de nuevo, el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez. 

Se evidenció, con cruce de información con el SRI y otras entidades de control, que la mayoría de centros de distribución operados en Guayas por la empresa Corpedesa-Gasgrupco y Gasquil, afiliados a Copedesa, “reflejan en gran medida un crecimiento exponencial de compras de diesel subsidiado. 

También —dice la denuncia de la entidad de control— otra empresa, Corpalubri, adquirió de estas empresas mencionadas cerca de 7 millones de galones de diesel subsidiado. La denuncia afirmó que “Gasquil y Copedesa-Gasgrupco eran utilizadas para el desvio de diesel del segmento automotriz al segmento industrial al venderle diesel a Corpalubri, ambas relacionadas con los ex accionistas denunciados (los hermanos Álvarez Henríquez.Ndlr) causando un gran perjuicio al Estado ecuatoriano”. 

La denuncia señala a la comercializadora Corpalubri con la venta a dos empresas de cerámica por 4.2 millones de galones de combustible, y 1.2 millones a otra empresa. La directora distrital del Guayas de la Agencia de Control, dijo en su denuncia ante la Fiscalía que “Comercializadora de Combustibles, Corpalubri facturó a estos dos consumidores finales mucho más de lo que compró a Petroecuador, lo que significa que este diesel facturado a los consumidores finales habría provenido de otro segmento del mercado, causando un gran perjuicio al Estado ecuatoriano”.

Esta empresa Corpalubri, cuyo representante legal es Aquiles Álvares, le compró, el 1 de febrero del 2022, un lote de 745 metros cuadrados a la compañía Consultores Legales y de negocios Worldlex, cuyo representante legal es Abdalá Jaime Bucaram Puley (Dalo Bucaram). Este lote está ubicado en el conjunto residencial Río Lago, uno de los más lujosos del sector de  La Puntilla, del cantón Samborondón, se negoció por USD 240.000. El registro de esta transacción está en la Notaría Octogésima Primera del Cantón Guayaquil. Sin embargo, según una alta fuente estatal, consultada por este portal, “no hay evidencia de que hizo el pago”.

Pero sí se habrían evidenciado los pagos mensuales de la empresa Corpalubri a una compañía constructora, que construyó una lujosa casa en ese solar. Así, dos años después, el 7 de febrero del 2024, en la misma Notaría, la empresa Corpalubri, de Aquiles Álvarez, vendió el terreno y la casa a una compañía llamada Silver Trading LLC, cuya apoderada en guayaquil era, según la escritura de compraventa, Nikita C.  La casa se vendió en 1’300.000. El representate legal de Silver Trading, asentada en Miami, es Carlos Pino Viteri, según consta en el poder general entregado a la Sra. Nikita C. para la adquisición, entre otras atribuciones, del bien inmueble de La Puntilla, según consta en la escritura  de la Notaría Pública de la Florida, de la notaria Martha Ospina. 

Sin embargo, de acuerdo a documentos a los que este portal tuvo acceso, esa casa estaría siendo habitada por Bucaram Puley y su familia, lo cual, para las autoridades consultadas, evidenciaría una relación cercana entre Álvarez y el político y abogado guayaquileño.  (PLAN V)

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