Personal militar se encuentra custodiando las centrales hidroeléctricas desde la tarde de este viernes 19 de abril, según comunicó las Fuerzas Armadas en un video difundido en sus redes sociales.
Los uniformados vigilan estas infraestructuras estratégicas “asegurando su operación ininterrumpida y protección contra amenazas a través de la supervisión constante y el uso de la tecnología avanzada…”.
Esta decisión se toma después de que el Gobierno de Daniel Noboa denunciara un sabotaje en el sector eléctrico por parte de sus exautoridades que supuestamente llevaron a que el país viva de nuevo días de apagones.
Puntualmente, se acusó a 21 exservidores públicos, incluida a la exministra de Energía, Andrea Arrobo, quien según la Presidencia, habría ocultado información de forma deliberada en contubernio con otros altos mandos sobre los problemas energéticos, lo que imposibilitó tomar decisiones a tiempo para evitar los cortes de luz a nivel nacional.
Además, Roberto Izurieta, secretario de Comunicación, dijo en una entrevista que el embalse de Mazar, que alimenta a la central hidroeléctrica del mismo nombre y a la Paute-Molino en Azuay, fue “vaciada intencionalmente”.
Algo que expertos han explicado es imposible, pues esa agua pasa a otra represa. (ECUAVISA)
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