Los bomberos del cantón Tisaleo, en Tungurahua, encontraron a Víctor I. recostado sobre una cama. El militar en servicio activo se encontraba pálido, sin presencia de pulso y pupilas dilatadas la madrugada del domingo, 3 de marzo de 2024.
Los rescatistas trataban de reanimarle con técnicas de RCP, mientras los trasladaban a una casa de salud en Ambato, pero sin éxito.
Los médicos confirmaron la muerte e informaron a los familiares para que inician los trámites de ley respectivos y a la Policía Nacional para que investiguen las causas del deceso.
La esposa contó a los uniformados que el soldado, de 30 años, había llegado a su casa en el barrio San Martín, en Tisaleo, el pasado sábado, 02 de marzo, desde la ciudad de Guayaquil, donde prestaba sus servicios.
Lourdes dijo que a eso de las 20:15 había comprado una pastilla para el apetito sexual pero que en ese momento no sé ha tomado. La pareja fue a una fiesta en donde consumieron bebidas alcohólicas y a la medianoche de retiran a su hogar.
En el parte policial se indica que en la casa se ha tomado la pastilla y han tenido relaciones sexuales. En horas de la madrugada se dirigen a su habitación a descansar cuando de repente empieza hacer sonidos fuertes y se desploma.
La esposa ha intentado reanimarle pero sin éxito y llama a los bomberos para que le ayuden.
Al lugar acudió la unidad de criminalística para la fijación de la escena y levantamiento del cadáver hasta el Centro Forense. (EL COMUNICADOR EC)
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